Comprender cuándo adoptar un enfoque de coaching sobre una manera de gestión puede marcar una gran diferencia en tu efectividad como líder. Para ser un líder efectivo necesitas dominar ambos estilos de liderazgo; la clave es saber cuándo usar qué sombrero.
Cuando estás gestionando, a menudo organizas un proyecto, brindas instrucciones, describes el objetivo final de tu negocio y puedes ser más directivo y orientado a las tareas. El coaching, por otro lado, es más evolutivo y está orientado a ayudar a alguien a resolver un problema. Deseas ayudar a los miembros de tu equipo a convertirlos en mejores y más valiosas personas guiándoles hacia donde necesitan ir.